Acto de reparación por las afrentas que Jesucristo ha sufrido en su Santa Faz
Os adoro y alabo, ¡oh mi Divino Jesús, Hijo de Dios vivo!, por todos los ultrajes que por mí, la más miserable de vuestras criaturas, habéis padecido en todos los miembros de vuestro cuerpo, principalmente en la parte más noble de vuestra humanidad, en vuestra santa Faz.
Os saludo, amable Rostro, maltratado, escupido y desfigurado por los bofetones y golpes que recibisteis de los judíos impíos. Os saludo, ¡oh hermosos ojos!, bañados en lágrimas, que habéis derramado por nuestra salvación. Os saludo, ¡sagrados oídos!, atormentados por infinidad de blasfemias, de injurias y de sangrientos sarcasmos. Os saludo, ¡oh santa boca!, llena de gracia y de dulzura para los pecadores, y amargada con hiel y vinagre por la monstruosa ingratitud del que habíais escogido por vuestro pueblo.
En reparación de tantas ignominias, os ofrezco todos los homenajes que se os tributen en este santo lugar, en el que queréis ser honrado con culto especial, al cual me uno de todo corazón. Amén
Os saludo, amable Rostro, maltratado, escupido y desfigurado por los bofetones y golpes que recibisteis de los judíos impíos. Os saludo, ¡oh hermosos ojos!, bañados en lágrimas, que habéis derramado por nuestra salvación. Os saludo, ¡sagrados oídos!, atormentados por infinidad de blasfemias, de injurias y de sangrientos sarcasmos. Os saludo, ¡oh santa boca!, llena de gracia y de dulzura para los pecadores, y amargada con hiel y vinagre por la monstruosa ingratitud del que habíais escogido por vuestro pueblo.
En reparación de tantas ignominias, os ofrezco todos los homenajes que se os tributen en este santo lugar, en el que queréis ser honrado con culto especial, al cual me uno de todo corazón. Amén
Fuente: oracionesydevocionescatolicas.com